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Zuavo de Infanteria 1855 - Escala 54mm
03.09.2012. 00:00
Zuavo de Infanteria - 1855 - Escala 54mm.Figura de Pegaso Model a escala 54 mm. La viñeta recrea la figura de un veterano soldado de infanteria ligera del Regimiento de Zuavos en el terreno de batalla.
El joven capitán del ejército de los EE.UU. George B. McClellan, que observó a estos exóticos y coloristas luchadores en 1855, elogió a los Zuavos como "La mejor infantería ligera que Europa pudo dar ... el beau-ideal de un soldado". No pasó mucho tiempo antes de que las unidades de milicia Americanas empezaran a adoptar los holgados pantalones, chaqueta adornada con galones y fez con borla de estos famosos guerreros galos.
Los orígenes de los Zuavos pueden estar en los Zouaoua, una tribu de gran fiereza de una kabila independiente que moraban en las rocosas colinas de Marruecos y Argelia. En el verano de 1830 un número indeterminado de Zouaoua ofrecieron sus servicios al ejército colonial Francés, y en Octubre del mismo año se organizarón en dos batallones de tropas auxiliares. Probablemente en la década siguiente estos Zuavos – lo que los franceses solían hacer con ellos – probaron su valor en docenas de sangrientas escaramuzas en el desierto bajo el mando del intrépido General La Moriciere. Aunque las unidades de Zuavos se fueron incrementando constituidas por franceses, su peculiar uniforme permaneció como una derivación de la vestimenta tradicional del Norte de África: Una chaqueta corta sin cuello, un chaleco sin mangas (gilet); voluminosos pantalones (serouel); faja de lana de 12 pies de longitud (ceinture); leggings de lona blanca (guetres); grebas de piel (jambieres); y por supuesto el fez rematado con una borla (chechia) y turbante (cheche).
En 1852 el Presidente Louis Napoleón, que poco después sería el Emperador Napoleón III, ordenó la reestructuración de los Zuavos en tres regimientos dentro del ejército regular Francés. Ahora estaban formados en su totalidad por franceses. En lo sucesivo, los Argelinos y marroquíes serían asignados a unidades de Tirailleurs Algeriens (Tiradores Argelinos), o Turcos, como eran conocidos popularmente, y vestirían su propia versión distintiva de uniforme Zuavo en azul claro. En 1855 el Emperador creó un cuarto regimiento de Zuavos con los mejores soldados de los otros tres regimientos, asignándolo a su Guardia Imperial. Cada unidad de Zuavos se distinguía por el color del falso bolsillo, o tombeau, sobre la guerrera azul: Rojo para el 1º, blanco para el 2º y azul para el 3er Regimiento. Los Zuavos de la Guardia Imperial usaron los adornos amarillos más que los rojos sobre sus uniformes, y sus borlas fueron amarillas más que azules, que eran las que usaban las otras unidades.
La Guerra de Crimea de 1854-55 vino a confirmar la reputación de luchadores de los Zuavos Franceses, y sus hazañas fueron ampliamente divulgadas en los periódicos Norte Americanos y Europeos. En la batalla de el Alma el 20 de septiembre de 1854, Los Zuavos escalaron una escarpada cresta capturando la posición rusa, impresionando incluso a sus imperturbables aliados Británicos con sus rápidas tácticas de infantería ligera y sus proezas con la bayoneta. En el encuentro de Inkermann del 5 de Noviembre, el 3º de Zuavos sufrió grandes pérdidas en un forcejeo mano a mano con los agresores rusos; también estuvieron los Zuavos en Balaclava, donde la Brigada Ligera Inglesa hizo su famosa carga. Pero fue en el prolongado y costoso sitio de la ciudad fortaleza de Sebastopol donde estos guerreros de llamativos colores ganaron inmortal renombre. El 7 de Junio de 1855, más de 500 Zuavos cayeron tomando el terraplén conocido como Mamelon Vert a punta de bayoneta. Tres meses después, el 8 de Septiembre, el Mariscal MacMahon condujo personalmente a los soldados del 1er regimiento en una carga que arrasó el Malakoff, un punto fuerte que era el eje de las defensas rusas.
Los Zuavos alcanzan el Malakoff en Sebastopol, en "L'Assaut du Zouave" de Horace Vernet.
En 1859 los Zuavos jugaron un valeroso papel para Francia y El Piamonte/Sardinia en la guerra mantenida con Austria por el control del Norte de Italia. En la sangrienta batalla de Magenta el 4 de Junio, los Zuavos de la Guardia Imperial ganaron 10 Cruces de la Legión de Honor y 50 Medallas Militares. Entre los recompensados con estas últimas estuvo Madame Rossini, la mujer encargada del aprovisionamiento del regimiento, o cantinera; la primera mujer en ser condecorada con La Medalla Militar. Después de la lucha, el Emperador colocó su propia Legión de Honor sobre el águila dorada y los colores del 2º de Zuavos, como tributo a su valor. El 24 de Junio de 1859 tuvo lugar la batalla Solferino, el enfrentamiento decisivo en la campaña italiana, los Zuavos encabezaron un asalto que rompió las líneas austriacas y decidió la suerte de la lucha a favor de Francia y sus aliados italianos .
La guerra Franco-Prusiana de 1870-71 fue una oscura página en la historia francesa, y terminó con la destrucción del Segundo Imperio. Los batallones de Zuavos fueron masacrados en las batallas de Worth, Mars La Tour, Gravelotte, y en el sitio de París.
Pero incluso después de la rendición y la abdicación de Napoleón III, Los Zuavos continuaron batallando en las filas de los ejércitos Republicanos. Un destacamento de Zuavos fue enviado por Pío IX para ayudar a Francia en el conflicto, sufriendo enormes pérdidas en el enfrentamiento de Loigny el 2 de Diciembre de 1870. A pesar del desastroso resultado de la guerra, los Zuavos encontraron su consuelo en el hecho de haber sido respetados al mismo tiempo que temidos por sus adversarios germanos.
Pero los coloristas Zuavos no sobrevivieron al siguiente gran conflicto europeo. El baño de sangre de la Primera Guerra Mundial sonó como un toque de difuntos de las galas militares del siglo XIX, con todas sus nociones de intrépidas bravuconerías y gloria. Durante el verano y el otoño de 1914 algunos batallones de Zuavos perdieron nada menos que 800 hombres en una única carga –formaciones de llamativos colores lanzándose inutilmente sobre la artillería y el fuego de ametralladoras alemán. Hacia mediados de 1915 los uniformes azul oscuro y rojo de la infantería francesa habían sido reemplazados por los más prácticos azul horizonte, el quepi rojo dejó paso al casco de acero. Las tropas coloniales, incluidos los Zuavos, fueron equipados con sombríos tonos marrón mostaza, el camuflaje en lugar del color, se convirtió en la regla general de todos los ejércitos del mundo. Con esa página final en su ilustre historial, los Zuavos pasaron a la Historia.
Autoria ( Liliput Model - Traducción: Julio Rabanal - Company A, 5th Regiment, New York State Volunteers Duryee Zouaves, Inc.- más el informe de un patriota mexicano. )
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